Open Banking: transformando la experiencia del usuario financiero

Alejandro Pérez | 11/07/2024 | 09:00

Alejandro Pérez
11/07/2024 | 09:00

Durante muchas décadas, las personas solo podían administrar sus finanzas a través de sus sucursales bancarias y con interacción directa con un empleado del banco. Lentamente, durante los últimos 20 años, las necesidades de los clientes han cambiado drásticamente. Cada vez más clientes están adoptando la banca por Internet, utilizando aplicaciones y confiando en los canales digitales incluso para transacciones más complejas, como solicitar un préstamo.

Open Banking es hoy sinonimo de digitalización y transformación del sector financiero, pero con un punto medular: adoptar lo digital para mejorar la experiencia del cliente. Ser verdaderamente digital implica redefinir la banca, asegurando tanto la creación de valor como su captación por parte de los clientes minoristas y comerciales para fomentar su lealtad. Esto va más allá de simplemente realizar actividades de manera más eficiente y rápida; se trata de una nueva forma de interactuar en cada una de las fases del usuario.

La experiencia del usuario juega un papel crucial en la industria financiera, no solo afectando la retención de clientes existentes, sino también influenciando la captación de nuevos clientes. Es fundamental asegurar que cada interacción sea intuitiva, eficiente y satisfactoria, ya que esto no solo fortalece la lealtad de los clientes actuales, sino que también atrae a potenciales clientes que buscan servicios financieros que se adapten a sus necesidades y expectativas.

Solo de esta manera, se puede crear un nuevo valor al atender las necesidades actualmente insatisfechas con propuestas financieras personalizadas destinadas a incluir, empoderar y poner a las personas en control de sus finanzas para respaldar sus objetivos de vida.

A medida que la industria financiera evoluciona en nuestro país, es crucial establecer confianza mediante una comunicación clara sobre la privacidad y seguridad de los datos de los usuarios, además de demostrar los beneficios concretos del open banking. Alinear los incentivos con las expectativas y necesidades de los consumidores no solo mejorará las tasas de adopción actuales, sino que también facilitará futuras innovaciones dentro del ecosistema de la banca abierta.