Actualmente, el sector bancario en México está concentrado en un grupo de cinco instituciones financieras quienes controlan el 65.2% del mercado, destacaron algunos expertos los cuales también coincidieron en la necesidad de una mayor oferta.
En el marco del seminario “Nuevos actores en el sistema financiero”, tanto Víctor Carreón, presidente del Consejo Consultivo de Finanzas Digitales de México Exponencial; José Aurelio Sáenz, consultor de bancos digitales y Pablo Pruneda, especialista en inteligencia artificial en el sector financiero; señalaron que dicha situación se debe a regulaciones que imponen procedimientos largos y complejos para obtener licencias bancarias, limitando la competencia y dificultando la incorporación de nuevas tecnologías y actores al mercado.
De acuerdo con Víctor Carreón, el gobierno tiene la oportunidad de aprobar licencias, dado que algunos procesos se encuentran ya en etapas finales. “En los últimos tres años, se han hecho nueve solicitudes para constituir bancos digitales. De ellas, por lo menos cinco siguen pendientes, y las que se autorizaron fueron para entidades que ya operaban como banco”.
Entre los principales beneficios de la entrada de nuevos actores, está el incremento en la competencia, la reducción de costos, la inclusión y mayores oportunidades para ofrecer herramientas de educación financiera para los usuarios.
Por ejemplo, los neobancos, como Nu, Konfío, Plata, Meli, y Finsus han impulsado la inclusión financiera al ofrecer servicios a segmentos de la población que hoy en día están desatendidos.
Con relación a las oportunidades que implica el incremento en el número de actores, los especialistas mencionaron que la transformación de las entidades financieras digitales, hasta convertirse en instituciones de banca múltiple, no representa ningún riesgo para los usuarios, ya que legalmente todas las responsabilidades, activos y pasivos se mantienen, y, al contrario, ahora son sujetos de más supervisión por parte de los reguladores.
En este sentido, la transformación a banco incrementa la cartera de productos disponibles y reduce costos, así como la garantía de seguridad que permite construir sobre la infraestructura tecnológica existente de la entidad anterior, en lugar de volver a construir desde cero.
Finalmente, los ponentes analizaron cómo es que los nuevos actores digitales están impulsando la innovación tecnológica, lo que tiene efectos positivos en todo el sector de servicios financieros. Innovaciones tales como la inteligencia artificial, avances en seguridad de la información y ciberseguridad.