A través de su reporte titulado “Ciclo político y finanzas públicas, el próximo ajuste fiscal”, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) informó que derivado de la entrada de un nuevo gobierno, México podría tener su mayor ajuste fiscal desde 1995.
De acuerdo con el CIEP, dicho ajuste fiscal se producirá como consecuencia de un aumento y recorte al gasto público, previo y después a las elecciones presidenciales del próximo 2 de junio.
El estudio también señala que la reducción del 2.9% del PIB en el gasto público estimado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), se daría principalmente en subsidios, servicios personales, gasto de capital y costo financiero de la deuda, lo que podría ocasionar una desaceleración económica.
Los especialistas señalaron que algunas de las alternativas para evitar impactos negativos en la economía y las finanzas públicas, son una reforma fiscal para fortalecer los ingresos presupuestarios, una revisión del gasto y programas sociales y/o un mayor endeudamiento; variables que deberán mantenerse conforme a lo estipulado en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH).
Ante el próximo ajuste fiscal, el CIEP reitera la necesidad de fortalecer las finanzas públicas a partir de los ingresos presupuestarios, revisar la eficiencia del gasto público y que en endeudamiento se lleve a cabo de manera responsable y en proyectos productivos y sociales con elevada rentabilidad, para asegurar la sostenibilidad en el largo plazo.